Morales Ojeda: El fascismo nunca ha desaparecido, debemos estar siempre alertas

Palabras de Roberto Morales Ojeda, miembro del Buró Político y secretario de Organización del Comité Central del Partido Comunista de Cuba, en acto conmemorativo por el aniversario 80 de la derrota del fascismo

Compañero Miguel Díaz-Canel Bermúdez, Primer Secretario del Comité Central del Partido Comunista de Cuba y Presidente de la República,

Representantes del cuerpo diplomático acreditado en Cuba,

Compañeras y compañeros:

Nos reunimos para conmemorar y rendir el tributo más profundo a un trascendental hito en la historia de la humanidad: el aniversario 80 de la victoria sobre el fascismo en la Segunda Guerra Mundial. Un día para recordar, honrar y reflexionar sobre uno de los periodos más oscuros del siglo XX.

Hace ocho décadas, el mundo se liberó de la garra opresora de regímenes totalitarios que sembraron el terror, la muerte y la destrucción. El fascismo, con su ideología de odio, racismo y supremacía, amenazó con destruir los valores esenciales de la libertad, la democracia y la dignidad humana.

La victoria sobre el fascismo fue el resultado del sacrificio y la valentía de millones de personas que lucharon en diferentes frentes: soldados, miembros de la resistencia, trabajadores, campesinos, hombres y mujeres de todas las edades y orígenes que se unieron para defender la libertad.

Este simbólico mausoleo, donde descansan los restos mortales de los hijos de la Unión de Repúblicas Socialistas Soviéticas que prestaron servicio en nuestro país es también escenario para destacar la importancia del pueblo soviético en la lucha contra el fascismo.

El propio Comandante en Jefe, Fidel Castro Ruz, quien en el acto por el aniversario 30 de esta fecha expresó: …“Nuestra propia experiencia sirve para dar una dimensión de lo que significó para la humanidad la victoria contra el fascismo, el aporte decisivo del pueblo soviético a esa victoria, los cuatro años de guerra y destrucción y los 20 millones de muertos para salvar a la humanidad del fascismo, para salvar a la humanidad del dominio universal del fascismo.”

“Fueron precisamente el pueblo y el ejército soviéticos quienes llevaron el peso fundamental y decisivo en la derrota del fascismo. Fue el pueblo soviético el que pagó el precio mayor, y el que realizó el aporte fundamental a la victoria. Sin ese aporte habría sido absolutamente imposible la derrota del fascismo. No se puede comparar la participación de ningún otro país al aporte soviético…”. (Fin de la cita)

El Ejército Rojo, mediante batallas decisivas como la de Stalingrado y Kursk, infligió golpes demoledores a la maquinaria de guerra nazi, marcando un punto de inflexión crucial que finalmente condujo a la derrota del Tercer Reich y la liberación de Europa del yugo fascista. Esta fue la victoria de la Gran Guerra Patria contra el fascismo.

Hoy debemos entender el significado del fascismo como la expresión más acabada del pensamiento reaccionario burgués e imperialista. Desde que Hitler declaró sus propósitos de agredir un día a la Unión Soviética, proclamó sus doctrinas racistas y sus ideas acerca del exterminio de pueblos enteros, de la esclavización de decenas de millones de hombres y de las conquistas de nuevos territorios.

Tras la victoria de 1945, el imperialismo yanqui, desató la guerra fría, fundó la OTAN, que existe hasta nuestros días con sus políticas imperiales y agresivas. Amenazó al mundo con el chantaje nuclear, cuando lanzó con toda intención y sin necesidad militar alguna, la bomba atómica sobre las ciudades japonesas de Hiroshima y Nagasaki.

Este aniversario tiene lugar, cuando la ideología fascista y sus prácticas tratan de reinventarse, adquiriendo las más diversas formas y recordándonos que el espíritu cruel y despiadado, así como la negación de todo humanismo y la anticultura de personajes como Hitler y Mussolini, permanece en las mentes de las élites oligárquicas e imperialistas en varios países del mundo, especialmente en nuestro continente.

Compañeras y compañeros:

Cuba se enorgullece del aporte de hijos de este pueblo en la lucha contra el fascismo en la Gran Guerra Patria. Los nombres de los hermanos Vivó, Jorge y Aldo y de Enrique Vilar son los más conocidos; pero un millar de compatriotas acudieron a salvar la República española y de ellos, 250 cayeron en combate; muestra del espíritu internacionalista, que pervive hasta nuestros días.

Nuestra América Latina y el Caribe, ha sufrido los efectos de las políticas del Gobierno estadounidense y su Agencia Central de Inteligencia, con el objetivo de derrocar a Gobiernos progresistas y de izquierda. Son sobrados los ejemplos de las sangrientas dictaduras a las que pueblos como Chile, Nicaragua y otros han sido sometidos, provocando la muerte y la desaparición de miles de personas.

Hoy continúan gestando golpes, financiando planes de subversión y promoviendo la judicialización amañada contra los principales líderes progresistas de la región.

Hoy vivimos expresiones que algunos intentan ocultar con otros nombres, las deportaciones, los secuestros, las cárceles ilegales, la persecución…, los crueles bloqueos que se imponen a nuestros países son también expresiones del nuevo fascismo.

Vemos resurgir discursos de odio, racismo, xenofobia, intolerancia y negación del Holocausto. Advertimos el crecimiento de movimientos extremistas y populistas que promueven la división, la polarización y la violencia. Percibimos amenazas en las instituciones democráticas y a los derechos humanos en muchos países del mundo.

Cómo nombrar entonces, al muro que se construye en la Frontera Sur de Estados Unidos, cómo se llama el no apoyo al desarrollo de la nación haitiana. Cómo catalogar al exterminio que tiene lugar en la franja de Gaza. Cómo denominar la falta de acceso al agua, a los alimentos, a la educación y a la salud de miles de pobladores del Planeta.

Los hechos que conmemoramos nos enseñan que un pueblo decidido a luchar, unido, valiente y heroico, con tradiciones revolucionarias y patrióticas es capaz de superar cualquier agresión y obstáculo por enormes que estos sean. La gran epopeya del pueblo soviético es un ejemplo digno a seguir y recordar.

La victoria contra el fascismo, que preservó la vida de millones de personas, demostró, además, que la unidad es decisiva en cada batalla y que juntos somos más fuertes y capaces de vencer cualquier adversidad. Por eso, siempre será indispensable en esta nueva contienda contra el imperialismo y sus actuales expresiones fascistas.

Honramos la memoria de las víctimas del Holocausto, de los campos de concentración, de las masacres y de todos los crímenes cometidos por los regímenes fascistas. Su sufrimiento no debe ser olvidado, para que nunca más se repitan tales atrocidades.

Conmemorar la victoria sobre el fascismo no es solo recordar el pasado. Es también un llamado a la acción en el presente. Hoy más que nunca, es necesario mantener viva la memoria de la lucha antifascista y transmitirla a las nuevas generaciones; es necesario educar a los jóvenes sobre los peligros del fascismo y promover los valores de la tolerancia, la diversidad, la inclusión y el respeto a los derechos humanos.

Urge promover la cooperación internacional y el multilateralismo para hacer frente a los desafíos globales, como el cambio climático, la pobreza, la desigualdad y las crisis migratorias, que pueden ser aprovechados por los movimientos extremistas para sembrar el miedo y la división.

Compatriotas:

Nuestro Partido y Gobierno mantiene su compromiso irrevocable de seguir al lado de las causas justas y de prevalecer en su práctica solidaria.

A 80 años de la victoria sobre el fascismo renovamos nuestro compromiso con la defensa de la libertad, la democracia y la dignidad humana.

Que la memoria de los que lucharon y murieron por la libertad nos inspire a construir un mundo mejor, un mundo donde nunca más el fascismo domine a la humanidad.

¡Viva el aniversario 80 de la victoria sobre el fascismo!

¡Gloria eterna a los héroes y mártires de la Gran Guerra Patria!

¡Abajo el fascismo!

¡Viva la unidad, la paz y la amistad entre los pueblos!