5 de septiembre: Cuando las ideas se abrieron paso en Cienfuegos

Olimpia Medina es uno de los nombres que vienen a la mente del pueblo cienfueguero este cinco de septiembre. Ella, niña de aquellas tierras quien perdió su vida a causa de la metralla “Made in USA”, que desde el cielo llovía en la Perla del Sur bajo órdenes de Batista.

Aquella mañana del quinto día del noveno mes de 1957, un grupo de marinos de conjunto con el Movimiento 26 de Julio protagonizaron un levantamiento que en pocas horas aglutinó al pueblo sureño en la lucha contra la tiranía, que no escatimó en municiones y armamentos para frenar el avance popular que controló la ciudad por cerca de 24 horas.

Como Olimpia, muchos otros cayeron víctimas de la desproporcionada respuesta contra la voluntad del pueblo, y los prisioneros fueron torturados y asesinados, algunos de ellos lanzados al mar después de muertos.

Lo que debió ser un levantamiento general solo ocurre en Cienfuegos, entre otras causas por la decisión unilateral de algunos de los oficiales del Ejército que participarían en posponer las acciones 24 o 48 horas.

“El hecho histórico cierto es que en horas del atardecer de ese mismo día (4 de septiembre de 1957), el compañero Camacho Aguilera, seleccionado por el Movimiento 26 de Julio para dirigir la acción en Cienfuegos, partió de la capital junto a Dionisio San Román, designado jefe militar en esta ciudad por el grupo de oficiales jóvenes, y se dirigieron hacia el centro del país. En Colón, se separan: Camacho sigue a reunirse con la Dirección del Movimiento 26 de Julio en Santa Clara; San Román continúa hasta Cienfuegos, donde ambos se vuelven a reunir alrededor de las 2:00 de la mañana, según recordó el Comandante en Jefe en el acto para conmemorar el XX Aniversario de dichos sucesos.

Rendimos homenaje a los héroes y mártires del levantamiento del 5 de Septiembre de 1957 en #Cienfuegos, uno de los hechos más gloriosos en la lucha contra la tiranía. Su ejemplo inspira. #CubaViveEnSuHistoria pic.twitter.com/r4TKe5KIg0

— Dr. Roberto Morales Ojeda (@DrRobertoMOjeda) September 5, 2024

Sobre las 5:20 am comenzó la operación a la que rápidamente se sumó la inmensa mayoría de la guarnición de la base de Cayo Loco. Los sublevados, junto al pueblo, se hacen en pocas horas del control de centros neurálgicos de la ciudad.

A pesar de no haber sido una victoria militar y de que no se puedo siquiera organizar un nuevo frente guerrillero en el Escambray con las armas ocupadas, esta acción exhibió las fisuras del ejército. Sobre este tema, Fidel, en la mencionada intervención expresó: “Pero es muy notable que en fecha tan temprana como el 30 de noviembre de 1956, ya un grupo de marinos cienfuegueros trabajara junto al 26 de Julio. Y que el 5 de septiembre de 1957 hubiesen luchado junto con los combatientes del 26 de Julio. Eso demuestra que cuando una idea es justa, una causa es justa, se abre paso aun en las filas del enemigo (…) Y por eso es tan justo que rindamos este profundo homenaje nacional al pueblo valiente y heroico de Cienfuegos, a los once militantes del Movimiento 26 de Julio, que murieron ese día en esta ciudad, a los cinco que murieron en Santa Clara, a los cuatro que murieron en La Habana, y a los veintiséis marinos que dieron su vida heroicamente ese día en esta ciudad luchando contra la tiranía, ostentando el brazalete del 26 de Julio y luchando por la Revolución”.

Han pasado 67 años y cada patriota caído en aquella jornada vive en el recuerdo de un pueblo que se aferra a su soberanía para que no caigan más bombas sobre inocentes y para que perduren los ideales de justicia y dignidad.